Hoy es historia: Auschwitz

Ana Portnoy

El Norte. Monterrey N.L., 22 de enero 2015. Sección Vida, pág. 7.

“…Esos poetas infernales,

Dante, Blake, Rimbaud

Que hablen más bajo

¡Que se callen!

Hoy

cualquier habitante de la tierra

sabe mucho más del infierno

que esos tres poetas juntos.

Ya sé que Dante toca muy bien el violín

¡Oh, el gran virtuoso!

Pero que no pretenda ahora

con sus tercetos maravillosos

y sus endecasílabos perfectos

asustar a ese niño judío

que está ahí, desgajado de sus padres

Y solo.

¡Solo!

Aguardando su turno

en los hornos crematorios de Auschwitz”

León Felipe[1]

 El 27 de enero, justo hace 70 años, el ejército soviético liberó Auschwitz, topándose con escenas espeluznantes. La industria de la muerte nazi se propuso eliminar a millones de personas: judíos, eslavos, gitanos, Testigos de Jehová, comunistas, disidentes políticos, homosexuales, discapacitados y prisioneros de guerra, trasladados como ganado a los campos de concentración con el argumento que se dirigían a campos de trabajo. En Auschwitz el letrero Arbeit macht frei -el trabajo os hará libres- permanece aún.

Una primera selección se hacía al bajar del tren de carga, separando a hombres de ancianos, mujeres y niños. Quiénes aptos para el trabajo forzado y quiénes enviados directo a la cámara de gas, sus cuerpos cremados en hornos construidos ex-profeso.

Mal alimentados, mal vestidos para las gélidas temperaturas, sin atención médica y maltratados continuamente, los presos desempeñaron trabajos a beneficio del ejército alemán. Cualquier indisciplina se castigó con la muerte.

Entre mayo de 1940 y enero de 1945 en Auschwitz fueron asesinadas 1,100,000 personas. Ahí el Dr. Mengele hizo experimentos de antropología y herencia genética siendo los prisioneros sus conejillos de Indias. La mayoría murió y los sobrevivientes resultaron incapacitados o desfigurados por la tortura médica.

Al acercarse el ejército rojo, los nazis pretendieron borrar toda evidencia, quemaron archivos e iniciaron con marchas forzadas la retirada del campo con los reos. Miles de personas más murieron en el camino.

En los países ocupados por Alemania hubo cerca de 42,500 ghettos, campos de detención, trabajo, concentración y/o exterminio donde murieron más de once millones de seres humanos entre los 50 millones de muertos en la guerra. El complejo Auschwitz-Birkenau fue el mayor campo de exterminio.

Patrimonio de la Humanidad desde 1979, Auschwitz es uno de los sitios de mayor simbolismo no solo del Holocausto judío, sino de los extremos a los que puede llevar la violación de los derechos humanos y la intolerancia contra el Otro.

El 1 de noviembre de 2005 la Organización de Nacicones Unidas, a través de la resolución 60/7, designó el 27 de enero como Día Internacional de la Memoria de la Víctimas del Holocausto como «un recuerdo de las lecciones universales del Holocausto, un mal único el cual no puede simplemente ser delegado al pasado y olvidarse».

[1] Poeta español exilado en México, fue el agregado cultural de la Embajada Española en el Exilio en nuestro país.