Fuente: Tarekhkerat. Teotihuac’an El Lugar De Los Dioses. En You Tube: <www.youtube.com/watch?v=yGox8hUSltI&feature=related>
Revelan entierros clases sociales.
Reforma.com, 25 de enero 2012. Cultura. <http://www.reforma.com/cultura/articulo/643/1284759/?compartir=929f3b4e0672211c56b223c5505d1d5f>
INAH: Las cinco estructuras fueron de uso doméstico, y una de ellas fungió como área residencial de la clase media.
Una reciente investigación realizada a los 33 entierros humanos, hallados en la periferia de la Zona Arqueológica de Teotihuacán en 2011, por especialistas del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), indica que en la periferia de la Ciudad de los Dioses vivía la clase media.
Detalló que la disposición de cuartos alrededor de un espacio abierto y patios destinados al culto doméstico, además de espejos de agua y sistemas de drenaje sustentan dicha revelación.
No obstante, Morales añadió que dichos materiales recuperados están bajo resguardo en los laboratorios de salvamento de la Zona Arqueológica de Teotihuacán, donde algunos aún son analizados.
Mientras que los vestigios de las edificaciones halladas fueron consolidados, restaurados y enterrados nuevamente, a fin de asegurar su conservación.
De la treintena de entierros hallados, cuyas ofrendas en conjunto suman más de dos mil objetos líticos y 31 mil fragmentos de cerámica, destaca el del Edificio 8, donde se descubrieron 15 con restos óseos de mujeres, niños y neonatos que aún son analizados, así como objetos de tipo ceremonial, entre ellos un vaso esgrafiado lustroso del Golfo de México que datan de 225 a 550 d.C.
Morales compartió que otro de los entierros que destaca es el hallado en la llamada Estructura 10, donde había cuatro depósitos funerarios con sus respectivas ofrendas, integradas por figurillas y vasijas cerámicas, un asta de venado y un fragmento de hueso de animal trabajado como aguja.
Por otra parte, la exploración hecha en la unidad arquitectónica 21, arrojó el hallazgo de un entierro que contenía los restos óseos de un infante de menos de un año de edad; a sus pies estaban fragmentos matados es decir, que fue roto de manera intencional, de un incensario de la fase Xolalpan (350-550 d.C.) a manera de ofrenda.
Mientras que en las estructuras 2 y 6 se localizaron los desplantes y algunos muros de adobe y tepetate que formaban cuartos habitacionales, así como 13 entierros y diversas ofrendas que aún son analizadas. Dichos restos arquitectónicos corresponden a las fases Tlamimilolpa Tardío a Xolalpa Tardío (250-550 d.C.).
En lo que respecta a los vestigios de objetos líticos y cerámicos que conformaban las ofrendas de los entierros, Morales señaló que de acuerdo con los estudios realizados, 90.5 por ciento de los 31 mil 307 tiestos cerámicos corresponde a las fases Tlamimilolpan y Xolalpan.
Finalmente, sobre los más de dos mil objetos líticos descubiertos, principalmente navajillas prismáticas, el 63 por ciento corresponde a obsidiana verde-dorada procedente de un área de Pachuca, y 36 por ciento a fragmentos de obsidiana gris originaria de Otumba.
Es importante mencionar que esta investigación formó parte del proyecto de salvamento arqueológico durante la construcción de un poliducto; los estudios abarcaron recorrido de superficie, pozos estratigráficos, calas de aproximación, excavación extensiva y análisis antropológicos y de materiales arqueológicos.