Mes: julio 2015
El arte secuestrado
Ana Portnoy
Laberinto, Suplemento cultural del periódico Milenio, No. 632. Monterrey, N.L., 24 de julio 2015.
Una de las consecuencias de las guerras es el pillaje. Durante la Segunda Guerra Mundial, los nazis orquestaron una trama destinada al robo sistemático de obras de arte en toda Europa, sustraídas de las casas de familias de coleccionistas, muchas de ellas judías, así como de museos, castillos y monasterios que fueron trasladadas a Alemania con la intención de que engrosaran las colecciones de museo de arte europeo que Hitler planeaba crear en Linz.
Obras maestras de la pintura occidental viajaron en trenes bajo las bombas, fueron ocultadas en minas y sótanos, otras fueron a parar a manos de los jerarcas nazis y muchas más acabaron en el floreciente y turbio mercado del arte durante los años de la guerra e inclusive la posguerra. La pista de no pocas de ellas se perdió definitivamente, mientras que otras volvieron a manos de sus legítimos propietarios, recuperadas por las tropas aliadas. Tras el fin de la Guerra Fría y por medio de protocolos internacionales firmados por casi 50 países –los Principios de Washington de 1998, las directrices de la Alianza de Museos Americanos de 1999 y la Declaración de Terezin de 2009- inició un movimiento internacional para la restitución de las obras de arte que involucra a prestigiosas instituciones culturales que han tenido en sus acervos obras de proveniencia dudosa, muchas de ellas reclamadas por las víctimas o sus descendientes.
De las 650,000 obras robadas durante el régimen nazi entre 1933 y 1945, se estima que 100,000 siguen desaparecidas o han sido identificadas erróneamente. Las recientes campañas de identificación y restitución se enfrentan a una creciente resistencia de las instituciones de arte que aducen que las pruebas de la expropiación son incompletas, que ha transcurrido demasiado tiempo desde los hechos y que las obras maestras son, de todos modos, patrimonio público.
La dama de oro, la historia extraordinaria del Retrato de Adele Bloch-Bauer es la obra escrita por Anne-Marie O’Connor, publicada en español por Vaso Roto Ediciones, que narra cómo María Altmann recuperó parte del patrimonio artístico de su familia que había sido expoliado, eufemismo por no decir robado, por los nazis.
Los antecedentes del litigio inician en marzo de 1938, cuando Austria fue incorporada a través del Anschluss al Tercer Reich y las medidas antisemitas se aplicaron de inmediato a los 192,000 judíos del país. A través de la Vermoegensverkehrsstelle, la oficina para el control de bienes y responsable de la confiscación, se saquearon sus casas, considerándose sus objetos de valor propiedad del régimen hitleriano.
En Austria, a cinco meses de la anexión, Adolf Eichmann inició la llamada solución al problema judío consistente en deportar a los campos de concentración a la población judía, política que luego se implementaría en Alemania y en todos los países ocupados por los nazis. Para 1945 un total de 65,000 judíos austríacos habían sido asesinados y 130,000 forzados al exilio, incluyendo al padre del psicoanálisis Sigmund Freud, al pintor Oskar Kokoschka así como a empresarios, científicos e intelectuales.
Anne-Marie O’Connor ha sido periodista, corresponsal de guerra y autora de diversos textos sobre la vida cultural e intelectual en nuestros tiempos. Reportera de Los Ángeles Times en 2001 conoció a María Altmann quien había iniciado un proceso legal contra el gobierno austríaco para recuperar cinco cuadros de Gustav Klimt, entre ellos el retrato de su tía Adele Bloch-Bauer, obra considerada “la Mona Lista de Austria”.
La dama de oro es un fascinante libro resultado de una investigación acuciosa y exhaustiva que reconstruye fidedignamente el ambiente que rodeó a Gustav Klimt, exponente el movimiento secesionista austríaco de principios del siglo XX y quien pintó el espectacular cuadro de Adele l, encargado por su esposo Ferdinand en 1903 y concluye 103 años después, cuando el cuadro recuperado por su sobrina es vendido a Ronald Lauder, heredero de la famosa línea de cosméticos y quien por años ha intentado recuperar las obras de arte confiscada o robada por el régimen hitleriano a familas judías de Alemania y Austria. Lauder trabajó para ese objetivo mientras fue embajador de Estados Unidos en Austria, formó parte de la comisión designada por el entonces presidente de Estados Unidos Bill Clinton para examinar casos del expolio nazi y es miembro de la “World Jewish Restitution Organization”. El retrato de “Adele Bloch Bauer I” es la pieza central de la colección de Lauder en su Neue Galerie de Nueva York.
Al morir a los 94 años en 2011, María Altmann dejó un legado que trasciende el esfuerzo que hizo por recuperar las obras de arte expoliadas, pues el proceso legal que inició con su abogado Randol Shoenberg, nieto del famoso compositor, fue largo y pavimentado de artilugios por parte del gobierno austríaco para evitar la restitución de lo que era su herencia legítima. Tras siete años de litigios y al obtener el fallo definitivo que reconoció su derecho a recuperar el patrimonio de su familia en 2006 estableció un precedente tanto en la Suprema Corte de Justicia de los Estados Unidos como ante el Derecho Internacional sobre la devolución de las obras de arte y los objetos que fueron el botín incautado por el hitlerismo, aún si éstos son considerados bienes estatales por algún gobierno.
Además de dar a conocer esa apasionante historia, La dama de oro nos permite reflexionar no sólo sobre las injusticias del pasado, sino también sobre nuestro tiempo.
Tras la tragedia del Holocausto se esperaría que hubiésemos aprendido la lección de los riesgos a los que lleva la intolerancia y la discriminación. El siglo XX, y al parecer el XXI también, se caracterizan por los genocidios, desde el poco conocido cometido en Namibia en 1904, el armenio en Turquía en 1915, el régimen del Pol Pot en Camboya en los años 1970, el llevado a cabo en Guatemala hace 30 años, las matanzas de tutsis y hutus en Ruanda y la limpieza étnica de los serbios contra los musulmanes en Bosnia en los 90’s. Hoy en día Estado islámico persigue y masacra a chiitas, cristianos y yadizis en Irak y Siria bajo conceptos, como lo hicieron los nazis, de limpieza étnica.
El libro también nos hace preguntar qué es lo que la obra de arte representa que conduce a su apropiación de manera ilegal, como los saqueos arqueológicos, o bien a su destrucción sin tomar en cuenta la riqueza cultural que representan, como sucedió con los talibanes en Afganistán hace una década y ahora con el Estado Islámico que lleva a cabo ataques deliberados contra la historia y la cultura milenarias de Irak y Siria, destruyendo y expoliando ojetos milenarios para hacerse de recursos, justificándolo como una limpieza cultural, como también sucedió durante el nazismo con la quema de libros, el robo y la destrucción de obras de arte.
Hoy es historia: Arte rupestre
Ana Portnoy
El Norte, Monterrey, N.L., a 16 julio 2015. Sección Vida, pág. 11.
Las pinturas rupestres son la primera manifestación artística considerándose las cuevas de Altamira “la Capilla Sixtina del arte cuaternario”.
Localizadas en Santander fueron descubiertas en 1868. Marcelino Sanz de Sautola, aficionado al naciente estudio prehistórico, las visitó por primera vez en 1875. En sus Breves Apuntes anotó: “Completamente desconocidas… cuando entré por primera vez fui con seguridad de los primeros que las visitaron. Ya existían las pinturas”. En su momento no les dio importancia y menos las supuso obra del hombre prehistórico. Tres años después volvió con su hija dispuesto a excavar buscando objetos de sílex y restos óseos.
A pesar de la escasa iluminación, la niña observó en el techo manchones ocres que formaban figuras de animales. Al señalárselos, Sanz se sorprendió y llegó a la conclusión que databan del tiempo en que los hombres vivieron en cavernas.
Las representaciones eran sumamente realistas con detalles de astas y colmillos, incluyendo animales ya inexistentes en Santander como mamuts, renos y elefantes, lo que le dio más certeza sobre su antigüedad. Sin embargo sus conclusiones fueron recibidas con gran escepticismo por parte de la comunidad científica.
El descubrimiento de Altamira cambió los conceptos que se tenían de la Prehistoria. El conocimiento del hombre paleolítico dejó de ser meramente teórico y a través de las pinturas se empezó a analizar su medio ambiente, su forma de vida, sus creencias y su mentalidad. Son evidencia del despertar del hombre al mundo de la representación como medio para manifestar inquietudes y temores.
El origen de las pinturas está íntimamente ligado con principios primitivos de magia y animismo. A través de la representación de los animales y su cacería el hombre pretendía asegurar su captura pues de ella dependía su sobrevivencia. También se les ha considerado el inicio de una concepción religiosa en la forma de culto al tótem, el espíritu propicio de la tribu. Por estos dos motivos es un arte realista que muestra la sensibilidad y creatividad de hombres que habían sido considerados salvajes y violentos.
En México se han hallado pinturas rupestres en Baja California y en Tamaulipas. En Nuevo León se han encontrado milenarios grabados en piedra en Parás, García y Mina, evidencia de antiguos cazadores y recolectores seminómadas. En Boca de Potrerillos, a 60 kms al noreste de Monterrey hay más de 3000 petroglifos hechos hace 8 mil años.
El arte rupestre es la primera manifestación de pensamiento abstracto del Homo Sapiens. Su majestuosidad y realismo siguen impresionándonos. Como todo lo producido por el hombre, el arte es también fuente de la historia.
Próximos cursos otoño 2015
La civilización islámica
Horario: Martes de 10:30 a 12 horas.
Lugar: Instituto Mexicano de Ejecutivos en Finanza
Fecha de inicio: 11 de agosto 2015.
Informes: 8363-0109
Un viaje por México.
Módulo 2: El esplendor maya
Horario: Miércoles de 11:30 a 13 horas.
Lugar: Fundación Educativa San José: Aula Juan XXIII.
Fecha de inicio: 12 de agosto 2015.
Informes: 8401-5500
Con opción de participar en un viaje de estudios a Villahermosa, Palenque y Bonampak.
Europa siglo XX: El final de la Guerra Fría y los retos contemporáneos.
Horario: Jueves de 16:30 a 18 horas.
Lugar: Fundación Educativa San José: Aula Juan XXIII.
Fecha de inicio: 13 de agosto 2015.
Informes: 8401-5500
Arte y Sociedad en la historia de México
Para comprender el presente y tratar de esbozar el futuro, es necesario conocer nuestro pasado, por lo que este curso abordará desde los contextos político, económico, social, religioso y cultural cada uno de los períodos de la historia de México: Prehispánico, Colonial, Siglo XIX y Siglo XX.
Será impartido por cuatro especialistas en historia de México.
Próximos cursos en el Aula Juan XXIII
Las colecciones inspiradas en Frida Kahlo
COLABORADORES ELLE / @ELLEMEXICO.
ELLE MÉXICO, Lunes 6 de julio 2015. <http://www.elle.mx/moda/2015/07/06/las-colecciones-inspiradas-en-frida-kahlo/>
Hoy Frida Kahlo cumpliría 108 años de edad, y para conmemorar a la artista mexicana, presentamos cinco marcas que se han inspirado en ella para hacer sus colecciones.
La pintora y poeta, casada con Diego Rivera y que vivió en la Casa Azul, no tuvo una vida fácil. Nacida en la Ciudad de México un 6 de julio de 1907, Frida Kahlo cumpliría hoy 108 años.